Cómo hacer mi autobiografía

La palabra “Recordar” viene del latín “recordare”. Si analizamos esta última, encontraremos que:

  • “Re” significa “de nuevo”.
  • “Cordare” viene de “cordis”, que significa “corazón”.

En pocas palabras, “recordar” significa “volver a pasar por el corazón”.

El acto de recordar tus vivencias, anécdotas, aprendizajes, caídas y triunfos, ya te coloca en el primer paso hacia escribir tu autobiografía. Una vez que empiezas a recordar, el siguiente ejercicio te ayudará a continuar avanzando con orden y claridad hacia materializar tu proyecto de escritura.

Ejercicio: “Escribe tu autobiografía”.

1. Delimita. Toma una pluma y una hoja, escribe en el centro la sensación que te gustaría producir en tus lectores cuando terminen de leer tu libro. Cuando tengas esa respuesta clara, se empezarán a revelar naturalmente cuáles son los episodios de tu vida deben de ir en tu autobiografía y cuáles no. Puedes poner conceptos como: “Que mis lectores sepan que el amor propio es lo principal”, “Que sepan que la familia está por sobre todas las cosas”, “Que todo es posible con enfoque y persistencia”, etc. Pregúntate cuál es ese principal legado que quieres dejar a tus lectores y sintetízalo en una frase corta.

2. Una vez que tengas clara la sensación que te gustaría provocar con tu autobiografía, has una lluvia de ideas sobre aquellas experiencias que tuviste que vivir para llegar a entender la vida como hoy la ves. Puedes guiarte con el siguiente ejemplo:

Cómo hacer mi autobriografía
Ejercicio: “Escribe tu autobiografía”. Voz de Loto.

3. Ordena tus vivencias de forma cronológica en una lista. Este listado será el borrador de tu índice y con él podrás guiarte para escribir cada uno de los capítulos de tu autobiografía.

4. Lee el primer tema de tu índice, haz un ejercicio consciente de recordar todos los detalles de esa experiencia y después empieza a escribir el capítulo.

5. La forma más práctica que hay para empezar a escribir un capítulo de tu autobiografía es imaginando que tienes frente a ti a una persona que te está escuchando mientras le platicas tu historia detalladamente. Cuenta a ese interlocutor imaginario cómo se ve la vida a través de tus ojos. Este ejercicio hará que puedas desarrollar y narrar mejor cada capítulo.

Preguntas frecuentes sobre cómo hacer tu autobiografía

¿Debo incluir toda mi vida en mi autobiografía?

Definitivamente no. Sigue el ejercicio “Escribe tu autobiografía” para elegir cuáles son los episodios relevantes de tu vida que irán en tu libro y cuáles otros no.

¿Debo hacer mi autobiografía en orden cronológico?

No es necesario que escribas tu autobiografía en orden cronológico, sin embargo, esto es lo más usual. Siempre ten presente que tú eres el autor de tu obra, así que tú tienes la palabra final sobre el orden que llevarán los capítulos de tu libro.

¿Debo pedir permiso a las personas que aparecen en mi autobiografía?

Más que pedir permiso, es recomendable que les comuniques de su aparición en tu historia como un gesto de cortesía. Por otro lado, recuerda que también tienes la opción de cambiar los nombres o los detalles de cada situación para poner el enfoque en tu historia, tus reflexiones y tus aprendizajes, y no tanto en las otras personas.

En Voz de Loto contamos con asesorías personales para guiarte en la escritura de tu autobiografía. También tenemos el taller “Escribe tu autobiografía” para grupos abiertos y privados. Si quieres tener más información sobre nuestros servicios, escríbenos en la sección de “Contacto” o llámanos al teléfono (+52)8110433621 en horario de oficina, estaremos felices de atenderte.

Escritura Empresarial: Faltas de ortografía más comunes

Escritura empresarial faltas de ortografía más comunes

Las faltas de ortografía y la mala redacción pueden dar una mala imagen y hacer perder clientes a tu empresa. En ocasiones, un acento, una coma o un error de dedo, pueden cambiar el sentido de toda una oración. Es por esto que te compartimos los errores más comunes en correos electrónicos o mensajería instantánea (WhatsApp) de la Escritura Empresarial.

Más / mas

Más: Mayor número o cantidad de algo mencionado. Ejemplo: Este equipo es más productivo.

Mas: Pero, sino. Ejemplo: Es barato, mas no profesional.

Porque / por qué / porqué

Porque: Por causa o razón de que. Ejemplo: Está frío porque es invierno.

Por qué: Pregunta la razón, causa o motivo. Ejemplo: ¿Por qué no enviaste los documentos?

Porqué: Responde la razón, causa o motivo. Ejemplo: Ese terreno es el porqué de esta negociación.

Hay / ahí / ay

Hay: Del verbo “haber”. Ejemplo: Hay cincuenta toneladas de frijol en la bodega.

Ahí: Para indicar un lugar. Ejemplo: Proviene de ahí.

Ay: Expresa movimientos del ánimo, dolor o advertencia. Ejemplo: ¡Ay de ustedes si no se logra!

Haya / halla / allá

Haya: Del verbo “haber”. Ejemplo: No es que lo haya olvidado.

Halla: Del verbo “hallar”. Ejemplo: Me lo hallé tirado en el pasto.

Allá: Para indicar un lugar. Ejemplo: Está allá en el segundo piso del edificio.

A ver / haber

A ver: Percibir con los ojos. Ejemplo: Vamos a ver el nuevo piso de ventas.

Haber: Conjuga otros verbos en tiempos compuestos e indica cantidades. Ejemplo: Debe haber quince personas en ese departamento.

Hecho / echo

Hecho: Acción, obra, o cosa que sucede. Ejemplo: Está hecho del mejor material que se encuentra en el mercado.

Echo: Del verbo “echar”. Ejemplo: Echa esos sobrantes a la basura.

Yendo / llendo

Yendo: Gerundio del verbo “ir”. Ejemplo: El encargado está yendo en este momento a la segunda planta.

Llendo: Palabra no existente.

Vaya / valla / baya

Vaya: Del verbo “ir”. Ejemplo: Le sugiero que se vaya por la derecha.

Valla: Cartel publicitario. Ejemplo: Ya pusieron las vallas con la publicidad de la película nueva.

Baya: Tipo de fruto. Ejemplo: Las bayas son frutos carnosos simples, como el tomate o la uva.

Te compartimos un último consejo valioso: si tienes duda con el uso de alguna palabra o conjugación, consulta el término en la página web de la RAE (Real Academia Española). Con esta práctica herramienta que tenemos al alcance, podemos ir mejorando cada vez más nuestra ortografía.

Si te interesa una capacitación de Escritura Empresarial para tu equipo de trabajo, te invitamos a conocer nuestro Taller de Comunicación Escrita para Empresas, en donde abordamos temas prácticos para profesionalizar la escritura en los departamentos de Ventas, Recursos Humanos, Atención y Operaciones.

Para mayor información, puedes escribirnos en la sección de “Contacto” o comunicarte al teléfono y WhatsApp (+52)8110433621 (en horario de lunes a viernes, de 10:00 a. m. a 6:00 p. m.).

Cómo hacer un cuento: ejemplos famosos

Cómo hacer un cuento inventado

Ya sea que quieras escribir un cuento para tus hijos, para un concurso, para publicar tu libro de cuentos, o simplemente como un gusto personal, en este artículo encontrarás las claves que te ayudarán a escribir una historia original.

Verás, lo primero que hay que saber es qué es un cuento. Pues bien, un cuento es el estudio de una anécdota. ¿Y qué es una anécdota? Es un hecho curioso, circunstancial y que rompe con nuestra rutina. Por ejemplo:

  • Cuando nos dirigimos a algún lado y nos encontramos a un amigo de antaño que teníamos mucho tiempo sin ver.
  • Cuando tenemos planeado un día perfecto y algo lo arruina.
  • Cuando pensábamos que sería un día normal y algo lo hace extraordinario.

Pensemos en el cuento de “Caperucita Roja”, este empieza narrando cómo la niña está disfrutando de un día normal, cuando de pronto su madre rompe su rutina para pedirle que haga algo: llevar una canasta con comida a su abuela. Luego, le da una serie de instrucciones y la niña se adentra en el bosque para lograr la misión encomendada. Esa misión estará llena de momentos que, en conjunto, le darán una gran lección de vida.

¿Cómo hacer un cuento creativo?

Para hacer un cuento creativo, es buena idea empezar por recordar alguna anécdota que te haya sucedido y usarla como base para escribir tu historia.

¿Recuerdas alguna anécdota que haya roto tu rutina? ¡Puedes empezar por ahí! No hay nada más creativo que la originalidad.

¿Cómo empezar a escribir un cuento?

Además de “Érase una vez” o “Había una vez”, inicios comúnmente usados en los cuentos infantiles, puedes arrancar de las siguientes formas:

  1. Describiendo al personaje.
  2. Describiendo el lugar.
  3. Describiendo la situación.
  4. Describiendo el final.
  5. Describiendo la época.

Por ejemplo, Julio Cortázar, inicia su mítico cuento “Casa tomada”, describiendo el lugar de la siguiente manera:

“Nos gustaba la casa porque aparte de espaciosa y antigua (hoy que las casas antiguas sucumben a la más ventajosa liquidación de sus materiales), guardaba los recuerdos de nuestros bisabuelos, el abuelo paterno, nuestros padres y toda la infancia”.

En el cuento “El avión de la Bella Durmiente”, Gabriel García Márquez empieza describiendo al personaje:

“Era bella, elástica, con una piel tierna del color del pan y los ojos de almendras verdes, y tenía el cabello liso y negro y largo hasta la espalda, y una aura de antigüedad que lo mismo podía ser de Indonesia que de los Andes”.

Empieza por hacer un cuento corto

El siguiente consejo es que empieces por escribir un cuento corto, puede ser incluso de una sola página. Apégate a contar una anécdota y no te preocupes por la extensión de la misma.

Habrás terminado de escribir tu cuento, cuando la anécdota quede resuelta. No hay una cantidad de palabras específicas que debas cumplir, usa las que creas que son necesarias. Y por último, no te preocupes por dejar una lección o moraleja, sino solo por contar una anécdota.

Si te interesa aprender a escribir cuentos o te gustaría hacer tu propio libro de cuentos, te invitamos a inscribirte en alguno de nuestros talleres de escritura, o bien, tomar asesorías personales de escritura con alguno de los expertos de nuestra editorial, estaremos felices de colaborar en tu proyecto.

Para más información, puedes entrar a nuestras redes sociales o escribirnos en la sección de “Contacto”, para compartirte las próximas fechas de arranque de talleres.

¡Te deseamos mucha inspiración!

Consejos para escribir un libro

Para escribir un libro, ¿qué se necesita?

A menudo creemos que se necesita mucha experiencia o un año sabático en una cabaña, pero no hay nada más alejado de la realidad.

No tienes que ser experto para escribir tu primer libro. Nuestro mejor consejo es que respondas las siguientes tres preguntas y enseguida emprendas el vuelo. Tus respuestas te ayudarán a no perderte en la trama y a que puedas mantener el ánimo y la claridad necesaria para continuar escribiendo hasta el último capítulo. ¿Estás listo? ¡Adelante!

1. ¿De qué se trata tu primer libro?

Durante un taller de escritura de nuestra editorial, un joven levantó la mano y preguntó: “¿Qué tanto debo profundizar en mi libro? Me siento perdido”.

Nuestra editora respondió: “¿De qué se trata tu primer libro?”.

Él le dijo que estaba escribiendo un libro para tener un balance en la vida, de tal forma que tocaba los temas de salud, dinero y amor. En el área de salud, él hablaba de nutrición, salud mental, ejercicio físico, alimentación, etc. En el tema de dinero, él hablaba de economía, finanzas personales, cómo emprender un negocio, cómo invertir, etc. Y en el tema de amor, él hablaba de amor propio, pareja, amigos, lazos familiares, etc.

El joven se sentía abrumado porque no estaba escribiendo un libro, ¡sino muchos a la vez!

Ahora te toca responder a ti: “¿De qué se trata mi primer libro?”. Detecta si puedes explicar en una sola frase tu respuesta, si es así, ¡felicidades!, tienes claro el sendero y será difícil que te pierdas. De lo contrario, busca enfocar tu respuesta. No tienes que escribir todo en tu primer libro, siempre podrás escribir un segundo, tercero o cuarto libro.

2. ¿En quién piensas cuando estás escribiendo tu libro?

“Es que mi libro es para todos, porque todos se pueden identificar con el tema”. Este argumento es la fórmula para un bloqueo.

Entonces, para escribir un libro, ¿qué se necesita? Un libro es una conversación imaginaria entre el autor y el lector. En esta conversación, el autor le cuenta historias o su propia experiencia al lector. ¿Pero cómo podemos desarrollar una conversación uno a uno, si la persona que está enfrente es otra (literalmente) a cada instante?

Cuando empezamos a escribir, nuestro cerebro puede presentarnos escenarios en los que busca conectar con todos los perfiles de lectores. Entonces nos pregunta cosas como: “¿Qué tal si esto lo lee algún adolescente?, ¿o si lo lee un abuelito?, ¿qué va a pasar si lo lee un ama de casa?, ¿y si lo lee alguien que está por graduarse?”.

No temas perder a un público adulto si estás pensando en un joven al momento de escribir tu libro y viceversa. El ejercicio de imaginar a tu lector frente a ti no es un estudio de mercado, sino una forma para que tu cerebro se enfoque al momento de estar escribiendo tu libro y, en lugar de presentarte dudas, te presente información directa y de calidad.

Desde luego, es válido hacer un estudio de mercado, pero en el proceso de escritura, procura imaginarte conversando con un solo lector para que puedas crear el efecto de conexión, eso es muy poderoso.

3. Cuando las personas terminen de leer tu libro, ¿con qué sensación quieres que se queden?

Cada barco, antes de zarpar, sabe a qué puerto se dirige. Cuando tus lectores cierren la última página de tu libro, ¿con qué sensación te gustaría que se queden? Si bien esto no significa que debes saber exactamente el final de tu libro, elegir lo que quieres provocar a tu lector, es una excelente meta que te dará claridad y dirección al momento de estar escribiendo cada capítulo.

Por último, recuerda que la primera etapa de tu libro es escribir el borrador del mismo, ¡y ningún borrador es perfecto! Diviértete en el proceso de escritura, inspírate todos los días y disfruta tu proyecto.

Te invitamos a seguirnos en nuestras redes sociales de Facebook, Instagram y Twitter como “Voz de Loto” para conocer los próximos talleres de escritura que se abrirán, o bien agendar una asesoría de escritura directamente. Puedes escribirnos en la sección de “Contacto” o a través del teléfono y WhatsApp (+52)8110433621, en horario de oficina.